Tú llegaste a mi vida para enseñarme. Tú supiste encenderme y luego apagarme. Tú te hiciste indispensable para mí, y con los ojos cerrados te seguí. Si yo busqué DOLOR, lo conseguí. No eres la persona que pensé, que creí, que pedí. MIENTES. Me haces daño y luego te arrepientes. Ya no tiene caso que lo intentes. No me quedan ganas de sentir.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario